Fundaciones

Nuevamente, nos sentamos alrededor de la Madre para escucharla, para dejarnos contagiar por ese fuego que le quema dentro y la ha empujado a esta aventura fundacional que nos convocará durante este año.

Sí. Nos reunimos a leer el Libro de las Fundaciones. Un libro, aparentemente, “inofensivo” en el ámbito de la espiritualidad, un libro de “crónicas” que no interesaría mucho a nadie externo a la Orden, sino fuera porque en realidad, Teresa, no puede dejar de decirse y decir aquello que la ha fascinado y que es la razón de su existencia.

Por eso, nos dejamos imbuir de su espíritu y nos sentamos a leer, a escuchar y a meditar.